Llegas a casa después de un duro día de trabajo y lo que más te apetece es disfrutar de un momento de tranquilidad especialmente pensado para ti. ¿Sabes hacerte un automasaje? Se trata de uno de los mejores placeres de este mundo y al que puedes recurrir siempre que quieras. Además de bienestar y tranquilidad, los masajes proporcionan elasticidad a tu piel. En este post te enseñamos a realizar diferentes tipos de automasaje.

Automasaje facial

Tu rostro es tu mejor carta de presentación. Es por ello que a todos nos gusta mantener una piel joven y tersa, en la que no destaquen las arrugas. Una buena idea para mejorar y mantener la salud de la piel es practicar el automasaje facial. Antes de comenzar, deberás desmaquillar la piel a fondo. Utiliza la leche facial limpiadora Spa Minerals de Equivalenza para dejar tu piel libre de impurezas.

Después, selecciona el producto con el que deseas realizar el masaje. Te recomendamos que optes por una de las cremas faciales de la línea Rosa de Bulgaria. Selecciona la crema que mejor se adapte a tu piel y deja que sus propiedades hidratantes, antioxidantes y regenerantes cuiden de tu rostro. Aplica una pequeña cantidad de crema en la barbilla y extiéndela hacia las sienes. Repite el gesto desde la barbilla hasta las clavículas.

Céntrate en los ojos

El contorno de los ojos es una de las zonas que más sufre el paso del tiempo, así que debemos mimarla con especial atención. Cuando realices un automasaje facial, tómate unos minutos para enfocarte en esta área.

Con la yema de los dedos, presiona la curvatura de las cejas, desde la nariz hasta los extremos. Tras ello, aplica el sérum antiedad contorno de ojos y labios bio con aloe vera y oliva en la zona más oscura del párpado. Realiza pequeños círculos con el dedo, desde la zona de la nariz hacia el interior. Un simple gesto que ayudará a que el contorno de tus ojos luzca más sano y deshinchado.

Libera tus piernas

Muchas personas sufren una sensación de cansancio y pesadez en las piernas que les hace sentirse incómodas durante la mayor parte del día. Un masaje, realizado de forma correcta, puede tener un efecto muy positivo en la salud de tus extremidades. Para masajear tus piernas, sigue los siguientes pasos. Túmbate en un sofá y apoya las piernas en la pared. Tensiona los músculos y mueve los pies, arriba y abajo, durante unos minutos.

A continuación, aplica aceites esenciales sobre la piel. Estos activarán la circulación de la zona, aliviando la sensación de pesadez y mejorando la calidad de tus vasos sanguíneos. Termina aplicando la loción corporal hidratante Spa Minerals para hidratar la zona y aportar un punto de elasticidad a la piel. ¡Te sentirás como nuevo!

 

Ahora que ya sabes cómo realizarte un automasaje, no dudes en reservar unos minutos para practicar esta rutina. En tu tienda Equivalenza encontrarás todos los productos necesarios para disfrutar al máximo de este momento.