De entre tantos conceptos que podemos encontrar en el mundo de los perfumes, uno de los más curiosos es el de las notas del perfume. Pero no os asustéis, es algo muy sencillo, simplemente es un método de análisis y clasificación de las fragancias. La gran variedad de aromas y perfumes que hay ha generado diferentes tipos de clasificación de los mismos.

Lo que hace que un perfume sea único o exclusivo son sus ingredientes y la forma en que se combinan. Son los ingredientes que forman el perfume los que determinan si un perfume pertenece a una familia olfativa u otra.

Qué son las notas

En la composición de cualquier fragancia encontramos las notas del perfume, y sus diferentes proporciones dentro del perfume son las que hacen que ese perfume sea único. Por lo tanto, esas notas, la mezcla de sustancias aromáticas, su equilibrio, es lo que va a dotar al perfume de una personalidad propia y distintiva.

Tipología: de salida, de corazón, de fondo

Notas de salida: Son las notas más efímeras y ligeras de todas. En solo 15 o 30 minutos se volatilizan y dejamos de percibirlas. Son los primeros acordes de un perfume, pero no por ello los más importantes. Es la primera impresión que nos deja el perfume, pero pasados los primeros minutos, ésta deja paso a las notas de corazón, que como su nombre indica, son las que muestran la esencia del perfume.

Notas de corazón: Son algo más pesadas y se dejan entrever transcurrida la primera media hora (aproximadamente) tras la aplicación del perfume. Las notas de corazón, también llamadas notas medias, suelen durar hasta dos horas, según los ingredientes y la naturaleza de cada piel.

Notas de fondo: Estas son las notas que forman parte de la fase más madura de un perfume, son denominadas también como notas de base. Predominan los aromas de larga duración como madera, cuero, tabaco y especias como la pimienta. Este tipo de notas tardan en ser percibidas, pero son la esencia y el carácter real de un perfume. Surgen al final de la evaporación y se mezclan con el olor de la piel. Son las que cambian radicalmente de una persona y otra. Es la fragancia que más tarda en percibirse, pero pueden durar más de ocho horas e, incluso, hasta el día siguiente.

De las notas a las familias

Según las notas olfativas que tenga cada fragancia podemos clasificar los perfumes en diferentes familias. En Equivalenza podrás encontrar las siguientes:

  • Cítricos: fragancias compuestas principalmente por notas de limón, naranja y manzana verde entre otros. Subfamilias: fresca, marina, afrutada, aromática, floral y amaderada.
  • Frutal: estos perfumes se componen de aromas de frutas como el pomelo, la manzana, el kiwi o la fresa. Subfamilias: marino, tropical dulce o floral.
  • Floral: las más populares y con mayor trayectoria en la historia del perfume tal y como te comentábamos en este post. Las notas florales pueden ser esencia básica del perfume o complemento de otras familias. Subfamilias: fresco, ozónico, musk, frutal, verde, floral, aldehydic, dulce, especiado, amaderado y oriental.
  • Chipre: fragancias de carácter fuerte, construidas con los acordes de musgo de roble, pachuli o bergamota, por ejemplo. Subfamilias: frutal, floral o amaderado.
  • Oriental: en esta familia se incluyen todas aquellas basadas en las vainillas, resinoides, esencias balsámicas y notas animales. Subfamilias: herbáceo, floral, especiado, amaderado, gourmand y ambarado.
  • Herbáceos: fragancias creadas con notas de salvia, romero, tomillo o lavanda, acompañadas en general de acordes hesperidados y especiados. Subfamilias: marino, aromático, especiado, amaderado y ambarado.
  • Amaderados: perfumes compuestos por notas de sándalo y pachuli, que aportan calidez; o cedro y vetiver, que son más frescos. Subfamilias: marino, aromático, especiado, amaderado y ambarado.