Ya es hora de dejar atrás las quemaduras de años anteriores. Este verano prepárate para disfrutar de tus vacaciones de una forma segura ante la exposición solar. Broncearte a la vez que proteges tu piel del sol es posible y en Equivalenza te explicamos cómo.
Toma nota de estos 10 consejos para cuidar tu piel bajo el sol:
Ponte el protector treinta minutos antes de tomar el sol
Según las recomendaciones mejor aplicarlo con un margen de tiempo de media hora. ¿La razón? Los fotoprotectores químicos tardan justamente 30 minutos en hacer efecto tras su aplicación. Es mejor ponerse la crema en casa antes de estar en plena exposición solar. De esta manera la crema se absorbe mejor y no se diluye con el sudor o calor.
Sé generosa con la cantidad de crema
Según médicos y expertos, solemos aplicarnos una porción de crema solar inferior a la adecuada. Por eso, debes tener en cuenta que por un envase de 200 gramos de crema solar deberías utilizar 35 gramos cada vez que quieras protegerte y el envase solo tendría que durar 6 veces de aplicación.
Cada dos horas, vuelve a ponerte crema
Tanto el sudor como los baños en el mar o en la piscina retiran parcialmente la crema solar, y en consecuencia la protección ante el sol se pierde. Por eso, se recomienda ponerse crema cada dos horas y sobre todo después de cada chapuzón.
Siempre ponte crema, incluso en los días nublados y según tu fototipo de piel
Aunque no sea un día de sol radiante ponte crema. Muchas veces en los días nublados es cuando más nos quemamos. Así que usa protección siempre y según tu fototipo de piel.
Descubre cuál es tu fototipo:
- I: Pieles muy blancas que nunca se broncean y con tendencia a quemarse. Se recomiendo un factor alto (50+).
- II: Pieles que se broncean ligeramente y que se queman con facilidad.
- III: Pieles que se broncean gradualmente y se queman un poco.
- IV: Pieles que se broncean con facilidad y no suelen quemarse.
- V: Pieles que siempre se broncean y no suelen quemarse.
- VI: Pieles morenas que raramente se queman.
Toma el sol durante las primeras y últimas horas del día
Tomar el sol entre las 11h y las 16h supone un riesgo de insolación y radiación mayor. Por este motivo se recomienda tomar el sol durante las 9h y las 11h de la mañana cuando el sol aún no pica con fuerza, y pasadas las 4 de la tarde que es cuando la radiación solar es menos intensa y directa.
Usa complementos cuando tomes el sol
Especialmente las gafas de sol y un sombrero serán tu salvación frente a un largo día de playa o piscina. De esta manera protegerás tus ojos y cara de los rayos ultravioleta del sol y además te sentirás la más “fashion” de la zona.
Alterna sol y sombra
Bastan 30 minutos de exposición solar sin protección para quemarte. Por lo que no puedes olvidarte de poner crema y sobre todo intercalar tiempo bajo el sol y bajo la sombra. Los médicos aconsejan tomar el sol un máximo de 20 minutos tres días a la semana, así que imagina la importancia de estar ratos en la sombra durante tu día de playa.
Protégete también con la alimentación
Puede sonar inverosímil, pero al igual que te dijeron que comer zanahorias ayuda a acelerar el bronceado, también te decimos que alimentarte bien puede ser otro factor de protección solar. Y es que la Vitamina D, las frutas y hortalizas rojas, naranjas y amarillas nos aportan un suplemento de protección y prolongación del moreno.
Tampoco olvides beber abundante agua o zumos naturales, así mantendrás tu piel hidratada.
Protege a los más pequeños
Protegerlos desde pequeños es importantísimo, pues más del 50% de la exposición solar que retiene nuestro cuerpo se concentra en los años de infancia y adolescencia. Así que la mejor manera de prevenir enfermedades de piel empieza desde temprana edad. Pon abundante crema a los más pequeños y con un factor solar alto.
Toma precauciones con el UVA
La radiación UVA puede generar envejecimiento prematuro en la piel, melanomas, irritaciones o quemaduras. Es por este motivo que cuando vayas a hacerte UVA, aunque los médicos los desaconsejan, sea con una garantía de seguridad. ¿La manera de estar segura? Revisando que las siglas UVA estén rodeadas por un círculo. Esto indica que es una radiación que no afecta a la piel. También puedes aplicarte crema solar antes de entrar en la cabina, así protegerás aún más tu piel. Además debes saber que existen dos tipos de radiaciones: UVA (la más común y la menos nociva) y UVB (mucho más fuerte y energética).
Después de leer todos estos consejos ahora tan solo tienes que ponerlos en práctica y hacerte con un buen kit de protección solar como el que te proponemos en Equivalenza. Te recomendamos probar la gama de productos solares Sun&Fun para que te protejas de cada rayo del sol. Así que durante estas vacaciones no te olvides en casa la Loción solar corporal mango SPF50+, Loción hidratante after sun melón y pepino, Loción solar facial melocotón SPF50+ y para los niños el Spray solar corporal fresa para niños SPF50+.
¡Ahora sí, ponte el bikini y a disfrutar de las vacaciones!